El descenso de barrancos es una de las actividades más divertidas dentro del turismo activo. Los Picos de Europa, representan una de las zonas más importantes para la práctica de barranquismo de nuestro país. Los toboganes, saltos, rápeles…hacen del descenso de barrancos una actividad obligada para cualquier visitante de estas montañas. Además la gran variedad de itinerarios hacen que esta modalidad sea ideal tanto para familias o principiantes como para expertos en este deporte.

No se necesita ninguna experiencia previa ya que existen diferentes itinerarios que van desde principiante a experto. En nuestro caso particular elegiríamos una ruta de nivel 1 o básica para que los clientes tengan una buena experiencia y no haya ningún tramo técnico.

El Barranco en el desfiladero de la Hermida, a unos pocos minutos de Potes , es muy completo. Con 3 o 4 rápeles, muchos toboganes y al final un salto opcional de 5-7 metros para descargar auténtica adrenalina. El Barranco tiene una aproximación caminando de unos 20 minutos cuesta arriba pero muy llevaderos. Entramos en un pequeño salto para habituarnos al agua. Después tenemos el primer rápel de 10m bastante vertical con final en poza, seguimos con algún tobogán, destrepes y un descuelgue-rápel de 3m para llegar al gran rápel de 20m. Continuamos con una sucesión de toboganes muy divertidos sobre todo en primavera que lleva un buen caudal de agua. Al final el barranco se encajona y tenemos un rápel de 6m en volado muy guapo, un pequeño salto, un tobogán y para terminar los que quieran un super salto de 7 metros. Dependiendo del número de personas y las ganas se pueden continuar un poco más con otro rápel y zona de caminar bonita.